#EducaciónArtística #Inclusión
La mejor manera de aprender
La EPEP N.º 426 Maestro Rural es la primera escuela de Formosa, que sin ser de modalidad Especial, tiene murales de Lengua de Señas y de Braille realizado por los propios alumnos que en menos de un mes aprendieron esas lenguas, algo que llenó de orgullo a la comunidad educativa.
Todo surgió el año pasado a partir de un proyecto del profesor Heber Godoy que convocó a la profesora de Artes Visuales y muralista Silvia Carolina Kujarchi, y con apoyo de la concejal Yanina Estigarribia –quien donó los materiales– el mural se realizó entre noviembre y diciembre con gran entusiasmo de los estudiantes de 5.º y 6.º grado turno tarde que preferían ir a pintar el mural que mirar los partidos del Mundial 2022. “Ellos estaban aprendiendo la lengua de señas y quisieron compartirlo con el resto de los niños de la Escuela para que todos pudieron aprenderlo”, contó a Día Seis la profesora Carolina.
La idea primera fue que Silvia bocetara y realizara el mural, pero en vez de eso fueron los niños quienes hicieron los bocetos empezando por la lengua de señas y luego el Braille: “Fueron los estudiantes los principales impulsores de la idea, cada niño dibujó en una hoja A4 la imagen de una persona realizando la seña correspondiente a cada letra del Abecedarioy los números del 0 al 9, y cada uno le dio su toque mágico y su impronta, plasmando en cada dibujo su personalidad. Luego eso fue transferido a una de las paredes de la galería de la Escuela que luego pintamos con mucha paciencia y prolijidad y así fue tomando forma un proyecto que cumplió ampliamente con el objetivo, que era compartir una lengua inclusiva”.
“Fue emocionante e inspirador —agregó la profesora— ver todos los niños y niñas y a los docentes acercarse, preguntar y practicar sus nombres con las señas del Abecedario que íbamos pintando, y ante tanta repercusión fuimos más allá y realizamos otro mural con alto relieve del Sistema Braille, también con el Abecederio y los números. Fue maravilloso ser partícipe de este proyecto ejemplar y ser testigo de la alegría y emoción de los alumnos al dejar en su escuela querida que los despedía un recuerdo invaluable de su paso por la institución; dejaron huellas de verdadera inclusión con amor, dedicación, entusiasmo y mucho color, un ejemplo para ser imitado”.
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