MÚSICA FORMOSEÑA QUE VUELVE: MATÍAS ARRIAZU Y EMMANUEL ÁLVAREZ

Un ciclo con artistas formoseños que continuará

Nota relacionada: Nota de tapa N.º 452

En el Museo Histórico y Regional Juan Pablo Duffard comenzó el ciclo Música formoseña que vuelve. El guitarrista Matías Arriazu y el pianista Emanuel Álvarez ofrecieron un concierto, y antes de la presentación los dos artistas dieron una masterclass de arreglos y armonía. Los dos acontecimientos –libres y gratuidos– fueron organizados por el Ministerio de Cultura y Educación de Formosa y son parte de una serie de conciertos y clases magistrales que proponen la presentación de reconocidos músicos formoseños que desarrollaron su carrera artística fuera de la provincia.

Matías Arriazu y Emmanuel Álvarez (Foto: Andrea Deniz)

 El ministro de Cultura y Educación, Luis Basterra, dijo que la primera presentación fue de música y anticipó que continuará con otros artistas que van a venir bajo esta modalidad para mostrar sus obras, su arte y que a la vez se genere un espacio para que puedan compartirlo con músicos locales. Estuvo en la masterclass que Arriazu y Álvarez dictaron para los músicos locales y en el concierto en el museo. “Estamos dando inicio a un ciclo que es Músicos formoseños que vuelven a mostrar lo que han desarrollado y aprendido en otros lados, tanto a nivel nacional como internacional, de forma tal de disfrutar de su arte, pero también que sirven de promotores de generadores de conocimientos y de espacios de análisis y debate de la importancia de las distintas disciplinas artísticas”.

La masterclass de arreglos y armonía
y el concierto fueron libres y gratuitos
(Foto: Andrea Deniz)

 

 

“La idea –dijo Basterra– es ir ampliando las distintas disciplinas artísticas, para además recuperar lo que es nuestra identidad y compromiso con la provincia, de forma tal de demostrarle a los jóvenes que nuestra provincia está en condiciones de desarrollar el arte, de hacerlo nacional e internacional. Además que tenemos mucho para dar de lo que ha sido conseguir este concepto de identidad formoseña que se ha logrado en estos últimos años, a partir de lo que ha sido este modelo formoseño se ha definido un modelo de identidad que nos hace ser muy optimistas. La conexión con el terruño, con el origen es el motor para que los artistas demuestren la predisposición de volver a interactuar, abrevar en la propia cultura y el encuentro. Esta es una oportunidad que nosotros vemos para que la juventud, los músicos, los escultores, pintores, puedan interactuar en este mundo que hoy está interconectado, que es una red y que es muy importante recuperar las experiencias de quienes hayan logrado avances en este campo del arte y puedan compartirlo localmente”.